Buenas, soy Jotapé y me gusta
reflexionar.
Ya hace tiempo que me vengo
dando cuenta de una cosa. Como siempre, la parte implicada en este asunto, es la
sociedad. Esa vil sociedad. Normalmente, suelo estar contento de estar rodeado
de mucha gente. Eso está bien. Te llena de orgullo y de satisfacción como diría
nuestro queridísimo Rey de la nación (véase pura ironía). Pero si que es verdad
que a veces, en algunos momentos, aun teniendo gente a tu alrededor, te siente
un poco solo. Eso, seguro, nos pasa a todos. Porque tienes a gente pero a veces
necesitas profundizar más y cuesta encontrar a la persona en quién creas tener
ese requisito tan exigente por tu parte. Por eso, es posible que el problema no
sea la gente que tienes a tu alrededor, si no la exigencia que tiene un mismo en
dar poder a alguna persona. Hay que tener claro que son partes más íntimas o
profundas de uno mismo, y eso hace que te crea un poco de inseguridad o que el
listón de “amigos” para ese concepto se pueda bajar a según qué nivel
¿no?
Pero la cuestión es otra. Que
me enrollo como siempre. Ya hace tiempo que vengo pensando en algunas personas
en concreto con quién estás ahí para escucharles sus penas, sus problemas,
darles consejos…Vamos, ser su pañuelo de lágrimas. Siempre he tenido respeto a
estos asuntos y he sido una persona que no sólo escucho si no que si tienen
algún problema por el cual han pasado y han estado algunos días mal, les he
echado bronca por no haberme avisado y haberse desahogado conmigo. Siempre he
sido partidario de que lo mejor que puede hacer uno es exteriorizar sus mierdas
y así no hacen tanto daño que si te las guardaras en tu interior. Que,
desgraciadamente, hacen muchísisisisisimo daño.
Pues ya me he dado cuenta de
que cuando alguien te tiene como su “recibe mierda”, realmente eres eso. Nada
más. Alguna vez que otra me ha pasado que después de escuchar todo, me toca mi
turno de explicar alguna que otra historia y ..zas! sorpresa, o tiene prisa por
irse, o te echa para fuera o simplemente aprovecha cualquiera de tus palabras
para asimilar a sus historias y volver la persona en cuestión a seguir con su
tema o otro parecido y, al final, sigues escuchando más mierda del otro sujeto y
tú te quedas con tu mierda dentro pues, o yo se ha pasado el tiempo o la otra
persona tiene prisa ahora por largarse.
Vaaaale!! Aun así, eso no
influye en que mi persona cambie y me vuelva de alguna manera más rancia hacia
esas personas. Sigo igual, escuchando y esperando si en algún momento, puedo
compartir algo de mí. Si no, es igual. Alguien habrá más entre mis círculos que
me escuche.
En fin, que quería compartir
esto pues el otro día me pasó (martes para ser más exactos) y me largué de donde
estaba con una sonrisa socarrona y pensando “esto lo tengo que dejar escrito, sí
o sí”.
Mañana más y peor.
Jotape
Hola Jotapé,
ResponderEliminarcreo que eso que te ocurre también nos pasa a los demás. Ya sabes, cuando todo va bien tienes muchos amigos a tu lado. Cuando tienes algún problema, todo el mundo huye y te quedas más solo que la una.
Qué pena!
Un abrazo!
Hola Erika, gracias por pasarte y comentar!!
EliminarEspero que hayas tenido una salida y entrada de año genial!!
por el tema, ya veo que entiendes de qué va en tus propias carnes. Sólo nos queda pagarnos un psicólogo para que nos escuche :-( o ya que estamos, quedamos un día y nos escuchamos mutúamente nuestra penas!! ;-)
Un abrazo muy fuerte!!