En el capítulo anterior:
Jotapé comienza a preocuparse por su apariencia. Su mujer empieza a poner la mosca tras la oreja. Que si ropa para ir bien arreglado, que si potingues para estar más “bello” y para colmo, tiene una historia comprometida con una chica mona y bien arreglada que le quiere vender cosmética para hombre. La cosa, no pinta bien…
Al día siguiente…
Después de la aventura de ayer en el centro comercial y de los correspondientes morros al llegar a casa, antes de cenar, antes de irnos a dormir, al levantarse por la mañana, a la hora de comer, etc, etc, wc. decido replantearme si ir o no al evento al cual me han invitado. A todo esto, acordarme de comprar un nuevo sofá. Hay un muelle que se clava en los riñones cuando duerm… digo, cuando te estiras.
Pero volviendo al tema, finalmente decido leerme todo lo que compré para ponerlo en práctica. Me he ido a comprar una revista para “hombres modernos” para saber cómo utilizar todo lo que he comprado: pautas, orden, lo mejor y lo peor, etc. Madre de dios, ¿para qué habré comprado esa revista? Me sale más a cuenta arreglarme la cara con photoshop que utilizar todos los recursos que me pide la revista. Es igual, ya que estamos, manos a la obra!!